La conocida como Industria 4.0 o Cuarta Revolución Industrial se caracteriza por plantear un nuevo paradigma en el ámbito de la industria y la fabricación. Esta nueva revolución tiene su punto de partida en el incremento y mejora de los niveles de conexión e interoperabilidad entre el mundo físico o de las cosas (things: máquinas, robots, dispositivos, materiales, productos) y el mundo virtual (apps, soluciones informáticas / TI), a través de la introducción extensiva de sensórica y la recogida masiva de datos.
La Fabricación Avanzada y de Industria 4.0 son tecnologías de aplicación al proceso productivo de la empresa y procesos de interoperabilidad interna y externa que faciliten la consecución del concepto de Fabrica extendida, digital y conectada 4.0.
El objetivo son las “Fábricas Inteligentes” ó “Smart Factories”. Fábricas independientes que funcionan en modo colaborativo, formando una inseparable cadena de valor.
Para entender mejor este concepto vamos a centrarnos en este artículo en la denominada Integración Horizontal (Cadena de Valor en la Industria) y comprobar cuanto de cerca ó de lejos esta nuestra empresa de este concepto
CADENA DE VALOR EN LA INDUSTRIA:
1º Autodiagnóstico
Digitalización de los procesos de la Cadena de Valor de la Industria:
1. ¿Cuál considera que es el nivel de digitalización de sus procesos? Ingeniería, Compras, Logística, Producción, Ventas, Servicio, etc.
2. ¿En qué medida los sistemas de información de su organización generan datos en tiempo real a lo largo de la cadena de valor (información proveniente de la maquinaria o de los procesos)?.
3. ¿Cuál es el grado de trazabilidad de la información durante el proceso productivo de su empresa?.
4. ¿Cuál es el nivel de calidad de la información generada por los sistemas de información de su organización?.
5. Valore la capacidad de la infraestructura tecnológica actual de su empresa para acometer un proceso de transformación a la industria 4.0.
Integración entre los procesos de la Cadena de Valor de la Industria:
6. ¿En qué medida se comparten y utilizan los datos generados por los sistemas de información entre las diferentes áreas de la empresa?.
7. ¿En qué medida se comparten y utilizan los datos generados por los sistemas de información con sus clientes?.
8. ¿Cuál es el nivel de integración e inteligencia digital con sus clientes (procesos digitales orientados al cliente)?.
9. ¿En qué medida se comparten y utilizan los datos generados por los sistemas de información con sus proveedores?.
10. ¿Cuál es el nivel de integración digital con sus proveedores?.
2º Pasando a la acción
Las preguntas anteriores son solo una pequeña muestra del nivel de Digitalización e Integración de la empresa, pero suficientemente representativa de la denominada Integración Horizontal (Cadena de Valor en la Industria).
Es indudable que si no hemos sacado buena nota en el autodiagnóstico, la conclusión es clara y debemos pasar a la acción.
1. Análisis del modelo de negocio:
En un extremo se encuentra la fabricación marcada por el pedido, donde el protagonismo lo tiene el producto, y donde por consiguiente la fabricación debe responder a las diversas variantes de personalización-configuración seleccionadas por el cliente. Para este enfoque de trabajo la gestión “por proyectos” suele encajar especialmente bien.
En el otro extremo encontramos un patrón de fabricación marcadamente seriado, donde el protagonismo lo tiene el propio proceso y el foco se encuentra en la eficiencia, la calidad, la disponibilidad del proceso de fabricación y la trazabilidad de materiales. En estos casos suele ser más conveniente apostar por un enfoque de gestión “por procesos”.
Y en el espectro intermedio, en la amplia gama de “grises”, se encuentran los patrones mixtos, donde los tipos de fabricación son combinaciones de los dos patrones extremos indicados anteriormente, y donde el verdadero reto se encuentra en lograr un equilibrio entre los dos enfoques. El objetivo es que la organización pueda adaptar de forma ágil sus productos y la cadena de valor a las necesidades cada vez más particulares de los clientes, a la vez que logra hacerlo manteniendo unos buenos ratios de eficiencia en los procesos, es decir, penalizando lo mínimo posible en calidad, tiempo y coste.
2. Análisis de ERP actual:
En el contexto de las Pymes industriales actuales y de la Industria 4.0, el ERP debe estar tecnológicamente preparado para integrarse a lo largo de toda la cadena de valor de la industria. Como es el caso de la integración con los entornos de ingeniería (CAD) o la captura de datos en planta (MES), según los requerimientos de los diferentes modelos de negocio mencionados anteriormente.
Si nuestro ERP no cumple con estas capacidades de integración, simplemente hay que cambiarlo, siempre nos va a dar pereza hacer este cambio, pero es inevitable y cuanto antes empecemos mejor.
En este punto hay que tener cuidado de no cometer errores en la selección del ERP, ya que si no acertamos, podemos incurrir en altos costes operacionales, que lastren la competitividad del negocio por mucho tiempo.
Conclusión final:
Lo primero es abordar el tema nuclear del ERP y definir bien los objetivos. A partir de aquí, la digitalización de todos los procesos industriales, afectará tanto a los procesos internos como a los externos y podremos abordar la Integración digital horizontal, impulsando procesos de interoperabilidad interna y externa que faciliten la consecución del concepto de Fábrica extendida, digital y conectada 4.0.